De las infecciones recurrentes a la libertad: cómo rompí el círculo vicioso de antibióticos, hongos y recaídas

De las infecciones recurrentes a la libertad: cómo rompí el círculo vicioso de antibióticos, hongos y recaídas

Mi historia personal, las causas ocultas y cómo fortalecí mi sistema inmune de forma natural

 

 

Durante años viví atrapada en un bucle agotador: infección, antibiótico, mejoría temporal, hongos, recaída. Una y otra vez.

Me sentía agotada, frustrada y, sobre todo, muy desconectada de mi cuerpo.


Mi historia no es única, pero casi nadie habla de ello. Y mucho menos te cuentan cómo salir de ese ciclo sin dañar aún más tu salud.

La gente lo suele normalizar,  “toma antibióticos y listo” esa es la solución común. No ven nada de malo en esto. Pero esto no ayuda desde la raíz. 

Por eso hoy quiero contarte cómo logré liberarme de esas infecciones repetitivas, qué aprendí en el proceso y qué herramientas naturales me ayudaron realmente.


 

 

🌀 Cuando el cuerpo grita lo que nadie escucha


Todo empezó con una cistitis. Después otra. Luego hongos. Luego otra cistitis. Vaginitis. Infección respiratoria.

Y cada vez, un nuevo antibiótico.


Sentía que perdía el control de mi cuerpo. Y lo peor: cada tratamiento parecía dejarme más débil.

Lo que nadie me dijo entonces es que:


👉 Los antibióticos no solo matan bacterias “malas”

👉 También arrasan con las bacterias buenas que nos protegen


Eso deja a la microbiota (la flora de nuestro cuerpo) desprotegida. Y sin microbiota equilibrada… las infecciones regresan.


 

 

🔎 ¿Por qué se repiten las infecciones?

 

Hay muchas razones, y casi nunca son solo físicas:


  • Desequilibrio en la microbiota vaginal o intestinal
  • Sistema inmune debilitado
  • Estrés emocional constante
  • Consumo excesivo de antibióticos
  • Alimentación rica en azúcares y procesados
  • Uso habitual de productos agresivos (geles íntimos, toallitas, etc.)


Yo tenía varias de esas cosas a la vez. Vivía en piloto automático, comía corriendo, dormía poco, me exigía demasiado.

Y mi cuerpo me estaba gritando “para”.


 

 

🌿 Cómo salí del círculo: mi plan de sanación natural


No fue de un día para otro, pero sí hubo un punto de inflexión: dejé de tratar los síntomas y empecé a cuidar la raíz.


Aquí te comparto lo que realmente marcó la diferencia para mí:

 

 

 

1. 

Reparar la microbiota

 

Porque sin un ecosistema interno sano, todo se repite.


  • Probióticos de calidad (refrigerados, con cepas específicas para infecciones urinarias y vaginales como Lactobacillus rhamnosus y reuteri)
  • Prebióticos naturales: semillas, fibras vegetales, chía, lino molido, plátano verde, avena
  • Eliminar azúcares y levaduras durante un tiempo (sí, también pan, bollería, alcohol)


2. 

Fortalecer el sistema inmune desde la raíz


  • Vitamina D3 + K2 (imprescindible si tienes los niveles bajos)
  • Vitamina C liposomal para reforzar mucosas y defensas
  • Zinc, que mejora la respuesta inmunológica
  • Extracto de propóleo y equinácea, en ciclos
  • Hongos medicinales como el Reishi o el Maitake, ideales si hay debilidad crónica


 

 

 

3. 

Sanar desde dentro: emociones y sistema nervioso

 

El estrés crónico baja las defensas. Vivir en modo alerta constante hace que el cuerpo no pueda repararse.

Yo empecé a:


  • Dormir mejor y priorizar el descanso
  • Respirar profundo varias veces al día
  • Dejar de exigirme tanto
  • Tomar infusiones suaves como melisa, pasiflora o lavanda
  • Y lo más importante: escuchar a mi cuerpo con amor, no con rabia


 

 

 

💧También cuidé mi zona íntima


  • Nada de geles perfumados
  • Solo agua templada o jabón neutro y baños con Árbol de té. 
  • Ropa interior de algodón, no apretada
  • Cero salvaslips
  • No automedicarme


Y aprendí a no tener miedo a cada pequeño síntoma, porque ahora sé que mi cuerpo tiene herramientas para defenderse… si lo cuido.


 

 

✨ ¿Y si tu cuerpo no te está fallando?


Durante mucho tiempo pensé que mi cuerpo estaba roto.

Ahora sé que mi cuerpo estaba agotado de no ser escuchado.


La verdadera sanación empezó cuando dejé de pelearme con él, y empecé a acompañarlo.

 

 


💌 Si tú también estás en ese ciclo, quiero decirte:

 

No estás sola. No eres rara. No eres débil.

Y sí hay forma de salir de ahí.


Si necesitas apoyo para fortalecer tu sistema inmune, recuperar tu microbiota o encontrar un estilo de alimentación más suave y sanador, escríbeme.


Estoy aquí para ayudarte desde lo vivido. No desde la teoría.




Victoria

Educadora infantil · Naturópata · Mamá de 4

Fundadora de Educar y Respirar

Acompañando a madres que quieren cuidar desde la raíz 🌿

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